sábado, 20 de junio de 2009

Tuberías

Las peores tuberías son las obstruidas. O no, rectifico, son peores esas en las que por algún sitio entra aire, y entonces empiezan a vibrar y hacer ruidos extraños, como gimiendo lastimeramente, y golpeando contra las paredes. Como un fantasma encerrado entre los ladrillos. Aunque las obstruidas siempre te hacen pensar en qué las estaría obstruyendo, lo cual suele disparar la parte más enfermiza de mi imaginación.

"Y encima de la mesa, reptan un montón de húmedas tuberías…"

2 comentarios:

Angel Rubio dijo...

Las tuberías de mi casa suenan a niños que lloran. La chimenea a monstruos que golpean. Al principio me parecía aterrador, ahora me río con la ocurrencia.

Tengo demasiada imaginación.

Luz Negra dijo...

...igual que yo... y espero no perderla nunca...