viernes, 18 de diciembre de 2009
jueves, 17 de diciembre de 2009
viernes, 4 de diciembre de 2009
jueves, 26 de noviembre de 2009
martes, 24 de noviembre de 2009
Kate Bush - Running Up That Hill
Do you want to feel how it feels?
Do you want to know, know that it doesn't hurt me?
Do you want to hear about the deal that I'm making?
You, it's you and me.
And if I only could,
I'd make a deal with God,
And I'd get him to swap our places,
Be running up that road,
Be running up that hill,
Be running up that building.
Say if I only could, oh...
You don't want to hurt me,
But see how deep the bullet lies.
Unaware I'm tearing you asunder.
Oh, there is thunder in our hearts.
Is there so much hate for the ones we love?
Tell me, we both matter, don't we?
You, it's you and me.
It's you and me, you won't be unhappy.
And if I only could,
I'd make a deal with God,
And I'd get him to swap our places,
Be running up that road,
Be running up that hill,
Be running up that building,
Say, if I only could, oh...
You,
It's you and me,
It's you and me, you won't be unhappy.
Come on, baby, come on darling,
Let me steal this moment from you now.
Come on, angel, come on, come on, darling,
Let's exchange the experience, oh...
And if I only could,
I'd make a deal with God,
And I'd get him to swap our places,
Be running up that road,
Be running up that hill,
With no problems...
Say if I only could,
I'd make a deal with God,
And I'd get him to swap our places,
Be running up that road,
Be running up that hill,
With no problems...
And if I only could,
I'd make a deal with God,
And I'd get him to swap our places,
Be running up that road,
Be running up that hill,
With no problems...
If I only could
Be running up that hill
With no problems...
If I only could, I'd be running up that hill.
If I only could, I'd be running up that hill.
http://www.youtube.com/wat
http://www.youtube.com/watch?v=nPwYW9y8_vE
miércoles, 18 de noviembre de 2009
Es espeluznante. Pensar lo cerca que estamos del colapso, y lo poco que nos separa de la enfermedad mental. Me he visto claramente en sus ojos. Me he dado cuenta de lo peligrosamente que me he acercado, de que aún sigo balanceándome sobre el cable (y ya sabemos el mal equilibro que tengo yo). Y he sentido claramente la posibilidad de perderme por completo, a que un día sufra un colapso yo también. Y necesito hacer algo. Necesito dejar de sufrir. Necesito esa paz que dices tú que buscas. ¡Qué irónico, ¿verdad?! Los dos buscamos lo mismo, y aún así no somos capaces de buscarlo juntos. Y me doy cuenta de que hoy me he derrumbado también yo, ante una tontería. ¡Todo me sale mal!, he llorado. Todo: tú, el trabajo, el viaje… Y al final es la cosa más tonta la que te hace derrumbarte, quizás por una reacción retardada a algo que ha pasado. No he podido evitar sentirme perdida cuando he leído el mensaje en el que me decías que ibas a ver un piso. Y a mí me pasa lo mismo que a ti. Ayer estaba yo también pensando que preferiría que todo pasase rápido, de una vez. Y hoy, que parece que mi deseo se va a hacer realidad, no puedo evitar sentirme desolada. Te acuso de hacerme montar en una montaña rusa (con lo poco que me gustan), y al final soy yo misma la que ha comprado la entrada.
sábado, 24 de octubre de 2009
sábado, 26 de septiembre de 2009
Esa fue nuestra última noche.
miércoles, 23 de septiembre de 2009
viernes, 28 de agosto de 2009
domingo, 9 de agosto de 2009
Mi encierro me crispa, me está volviendo ansiosa. Necesito salir, moverme, simplemente sentarme en un banco al aire libre para tomar una bocanada de aire fresco. Mi dolor me vuelve hipersensible. Mis sentidos se amplifican. Lo oigo todo, lo huelo todo, lo siento todo como si fuese la primera vez. Me siento marearme.
Cuánto echo de menos tu pecho, para recostarme en él, mientras el vello me hace cosquillas en la nariz. Cuánto echo de menos sentir tu aliento en mi nuca, tu brazo bajo mi cuello y tu mano sobre mi cadera. Cuánto echo de menos tu piel suave, dorada, y el olor, el calor, en ese hueco tras tu oreja.
…y cuánto me alegro de pasar esta noche sola, sin nadie, pudiendo recordarlo, imaginarlo todo, como si nunca hubiese terminado, como si todo siguiese igual.
Aún no he pasado una noche contigo, y ya te echo de menos. Tengo un recuerdo de ti sin haberte tocado siquiera. No dejaré que la realidad estropee todo esto… espero que todo siga siendo siempre una fantasía, la ilusión de un recuerdo…
Tengo tantas ganas de que vuelvas, de volver a verte…
domingo, 2 de agosto de 2009
sábado, 18 de julio de 2009
domingo, 12 de julio de 2009
“¿Crees en el amor a primera vista?” me preguntó aquel día. Sacudí la cabeza, y, con vehemencia, exclamé, categórica: “NO, eso son inventos, cuentos de novela romántica y culebrones y películas de Hollywood.” Él inclinó la cabeza, despacio, y suspiró. Nunca habíamos estado tan lejos el uno del otro, a la vez que tan cerca… Mentí como una bellaca. Mentía para no tener que decirle que sí, que creía, porque lo había vivido, lo había sentido precisamente con él, por primera vez en muchos años. No iba a hacer esa confesión, ahora que lo estábamos dejando, ahora que todo se había acabado, ahora que todo era inútil ya…
Debería sentir dolor, mi estómago se debería encoger dolorosamente, mi garganta debería arder, mis párpados deberían humedecerse... pero sólo siento rabia, y un enorme vacío extendiéndose dentro de mí…
Cosas que no debo pensar…
jueves, 9 de julio de 2009
Hoy es uno de esos días en los que las ideas se agolpan en mi cabeza, apretadas contra la tapa de mis sesos, peleando entre ellas por salir la primera. Aquí no hay botes salvavidas ni flotadores, así que toda la que consiga salir, morirá igualmente, llevada por el viento que azota los árboles desnudos y desordena mi cabello.
No puedo pensar en nada más, porque ellas ocupan toda mi capacidad neuronal.
Como una zombi, camino hacia la parada de autobús y me siento. Miro las líneas del suelo, casi borradas ya. Los autobuses pasando hacen temblar el suelo, y me parece que las grietas del asfalto se expanden a su paso.
La falta de movimiento, la parálisis, frena mi flujo sanguíneo, y los labios se me entumecen, cosquilleando apenas cuando musito algún verso de la canción que estoy escuchando una y otra vez, sin parar... una canción que habla de amor, miedos y sueños...
¿Dónde estará Pinocho? Echo de menos su sonrisa...
miércoles, 8 de julio de 2009
miércoles, 1 de julio de 2009
sábado, 27 de junio de 2009
viernes, 26 de junio de 2009
miércoles, 24 de junio de 2009
Casualmente, rozas mi brazo, y me siento morir…
lunes, 22 de junio de 2009
Poner un pie delante de otro... y no parar nunca...
sábado, 20 de junio de 2009
Tuberías
"Y encima de la mesa, reptan un montón de húmedas tuberías…"
Resbalar (nota crítica)
Imagínate sumergida en la pileta de una piscina muy ancha y profunda. Nadas hacia arriba, pero alguien te sujeta con las piernas, de modo que no puedes salir a la superficie. Pero no te deja morir: toma el aire del exterior y te lo da de su boca, bajo el agua, porque sabe que, si mueres, arrastrarás con tu peso también su cuerpo al fondo. Por tu parte esperas, con tanto odio como avidez, el alimento de sus labios, que te mantienen viva…
Hilos irrompibles."
M.M.M.
Resbalar
Uno de mis pensamientos recurrentes es precisamente ese, una muerte absurda, casi de película…
Al salir de la ducha casi resbalo. De repente he perdido todo control sobre mi cuerpo, y mi pie se ha deslizado entre los restos de espuma. He sentido una punzada de pánico, una ola de calor seguida de un sudor frío. Y una sensación de impotencia e inutilidad. Y luego he empezado a pensar. ¿Qué ocurriría si me hubiese caído? ¿Me dejo caer? Me habría partido algo, contra el esmalte de la bañera, con una fractura abierta de la que sobresaldría una astilla de hueso blanca, o me habría retorcido un miembro en una posición inverosímil. Como un pelele. O me habría clavado el grifo. Preferentemente en los genitales. Algo realmente sangriento. ¡Qué bonita es la sangre, tan roja sobre el esmalte blanco! ¡Y ese precioso remolino rojo cuando huye por el desagüe! O quizás directamente me desnucaré. Sí, eso es lo más probable. Y lo mejor. Sería menos doloroso. Y mi cuello retorcido en una posición inverosímil. Como una marioneta a la que han cortado los hilos. ¿Y quién me encontrará? ¿Cuál será su reacción? ¿Cuánto tardarán en encontrarme? ¿Realmente alguien me echaría de menos?
Dice el diccionario que resbalar es incurrir en un desliz. Entonces sólo sería otro desliz, uno de muchos. Otro gran patinazo. Siempre cayendo o dejándose caer. Perdiendo el equilibrio. Uno más en una vida a base de maravillosos deslices, de pérdidas de equilibrio.
De extremos, de sorpresas, de estupidez y de pérdida de tiempo. Me arrepiento de tanto y de nada. Me arrepiento de ser como soy y a la vez estoy orgullosa de ser así. Sé que debo conducir mi vida, pero a la vez soy consciente de que no me pertenece.
Me han quitado mi vida, ya no vivo para mí. Me he puesto hilos, y soy a la vez marioneta y marionetista. Mis hilos son mi adicción...
Es todo tan confuso, todo tan resbaladizo, tengo tanto miedo de caerme y hacerme daño...prefiero matarme. Voy con pies de plomo, agarrándome a lo que puedo, balanceándome, intentando mantener el equilibrio. Y siempre surgen nuevos deslices, pequeñas pérdidas de equilibrio, con su punzada de pánico y su oleada de calor. Y luego esa horrible sensación de impotencia, de falta de agarre, de caída, que no sé cómo parar, porque parezco hundirme cada vez más en ella, como en arenas movedizas. Cuanto más me muevo intentando salir, más me hundo. Me enredo con los hilos, que me ahogan y no me dejan moverme. Y esa opresión en el pecho, y ese soniquete continuo en el cerebro, que no para: “otra vez otra vez otra vez otra vez otra vez otra vez otra vez otra vez otra vez otra vez otra vez otra vez otra vez otra vez otra vez otra vez otra vez otra vez otra vez otra vez otra vez otra vez otra vez otra vez otra vez otra vez otra vez otra vez otra vez otra vez otra vez otra vez otra vez otra vez otra vez otra vez otra vez otra vez otra vez otra vez otra vez otra vez otra vez otra vez otra vez”. Otra vez la has jodido...
Y entonces alguien me corta los hilos, y por un momento me hundo sobre mí misma.
Me siento perdida, sin fuerzas... ¿y ahora de dónde me cuelgo?
Pero entonces, de repente, soy plenamente consciente de que puedo moverme perfectamente sin hilos, que no los necesito. Que no he entendido nada, que los hilos no son necesarios, que si quiero puedo volar incluso...
lunes, 15 de junio de 2009
sábado, 13 de junio de 2009
viernes, 12 de junio de 2009
miércoles, 10 de junio de 2009
El sol a mi izquierda, ascendiendo lentamente por el cielo. Entre el sol y yo, una valla de rejilla fina. El efecto de la luz en mis párpados cerrados es casi estroboscóbico: rojo, negro, morado, granate... los colores de la sangre y de la carne... sucediéndose rápidamente...
Me mareo. Abro los ojos para no caer. La claridad me ciega. La sensación de paz se desvanece...